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“Todas las mujeres tienen derecho a recibir el más alto nivel de cuidados en salud, que incluye el derecho a una atención digna y respetuosa en el embarazo y en el parto, y el derecho a no sufrir violencia ni discriminación”, reza una de las declaraciones de la Organización Mundial de la Salud. ¿A qué hace referencia? A la violencia obstétrica que es sufrida por gestantes y sus familias al momento de llevar adelante un embarazo, trabajo de parto, parto y posparto.
Si bien Argentina es un país pionero en derechos reproductivos, ya que a nivel nacional en 2004 se sancionó y en 2015 se reglamentó la Ley 25.929 de Parto Humanizado (en Santa Fe se adhirió hace dos años y se reglamentó hace sólo dos semanas); el destrato es moneda corriente en cualquiera de las instancias que lxs gestantes sufren al momento de llevar adelante una gestación y posteriores procesos. Maltratos verbales, físicos, humillaciones, críticas, intervenciones innecesarias y utilización abusiva de fármacos, se cuelan entre los derechos vulnerabilizando aún más una situación de por sí compleja.
Violencia obstétrica, qué es y cómo reconocerla
“Si bien existe la Ley 25.929 que explica qué es lo que se concibe como violencia obstétrica, creo que además de esas prácticas, conductas, acciones u omisiones que el personal de salud ejerce sobre los cuerpos de las mujeres y sus procesos reproductivos; el concepto es un poco más amplio”, nos explicó Lucía Brienza (MP 3627), psicóloga diplomada en psicología perinatal.
Sobre ello, nos contó que existen diversos procedimientos como falta de información, destratos y demás acciones u omisiones que pueden llevar a que, incluso, una mujer preste consentimiento sobre prácticas que se le realizarán, sin tener real noción de lo que esto implicaría. Todo ello sucede durante los intentos de concepción, gestación, parto, posparto, tanto hacia ellas como también, muchas veces, hacia sus bebés.
Violencia obstétrica, violencia de género
“Hay muchas mujeres que tardan mucho tiempo en tomar conciencia de que se las ha violentado”, destacó la profesional. Además de ser violencia de género por ser ejercida contra las mujeres, posee a su vez “todas las características que suele tener la violencia de género en otros ámbitos”.
En tal sentido, la psicóloga enumeró: “Está el ninguneo, el menosprecio, la infantilización, tomar a la mujer como objeto, que no pueda tomar decisiones sobre su cuerpo, sobre su proceso reproductivo; además de que en ese momento nos encontramos más indefensas y entregamos nuestra confianza a profesionales que no respetan la integridad ni se percatan de que estamos en un momento de vulnerabilidad máxima”.
Violencia obstétrica, derechos y nuevas figuras
Los recursos que aparecen son innumerables, además de la lógica formación e información. En Rosario, ciudad pionera en, por ejemplo, instalaciones para respetar procesos fisiológicos como sucede en el Hospital Roque Sáenz Peña, es común la aparición de la figura de otros acompañantes durante el proceso de embarazo, trabajo de parto, parto y puerperio. Así es que aparece la figura de las doulas.
Ofelia López es parte de Doulas de Rosario y nos contó: “La doula es una figura femenina que viene a acompañar los procesos de embarazo, trabajo de parto, parto y puerperio. Acompañamos desde lo emocional, brindando recursos, pero también información y contención a mujeres y sus familias en estas etapas”. Brindar información, con evidencia científica, permite que mujeres y sus familias estén atentas a las situaciones, se empoderen y escuchen sus reales necesidades; pudiendo hallar realmente a profesionales que las acompañen en estas decisiones.
“Muchas veces se realizan intervenciones que la mujer no sabe bien por qué se hicieron, no se las ha informado ni se les ha preguntado, incluso en casos donde no hay urgencia, que ahí sí se podría comprender que no hay tiempo para brindar mayores explicaciones”, destacó Ofelia. “Como consecuencia, aparecen dudas, la angustia, el pensar que hay fallas en el propio cuerpo que no funciona bien, y esto incluso llega a tener secuelas en la lactancia y la dificultad al momento de amamantar”, agregó.
Violencia obstétrica, la prevención es responsabilidad de todxs
“A pesar de la ley, muchísimos derechos se pasan por alto. Por eso, la mejor manera es informarse sobre los mismos, así como informarse sobre los procesos de un parto fisiológico, de un embarazo, de los tiempos del embarazo, de los tiempos del parto, las características de cada uno, así como también en relación al puerperio”, destacó Lucía.
Además de quien se encuentre atravesando el proceso, es importante la información por parte de las parejas de las mujeres, en caso de que existan, o sus familias o quienes las acompañen en ese momento. “De esa manera, se podrá entablar un vínculo con los profesionales, tener un ida y vuelta acerca de lo que sucede en un nacimiento, sacarse dudas, entre otras cuestiones”, indicó Ofelia.
Por otra parte, la formación e información por parte de profesionales de la salud resulta otra pata fundamental. “Hay creencias de que muchas veces las mujeres exageramos, y eso genera violencia psíquica. Muchos profesionales deben abandonar la soberbia de creer que saben todo, no sólo en cuanto a contenidos científicos en sus prácticas, sino en torno a los tratos humanos esperables que reciba cualquier mujer en un proceso de estas características”, manifestó la psicóloga.
A su vez, la doula resaltó la importancia del trabajo interdisciplinario en las instituciones. “Que además de todos los profesionales de la salud, mucamas, gente de administración y cualquier persona que trabaje en la institución y tenga contacto con la mujer embarazada y su familia, tenga un mismo objetivo: brindar información, estar abiertos y acompañar a esta mujer conteniéndola en mayor o menor medida según su rol”, concluyó.
Violencia obstétrica, ley en las prácticas
El compromiso, como parte de la sociedad, es con la puesta en acción para ver resultados más beneficiosos para todxs. Si bien la reglamentación sucedió hace pocas semanas en nuestra provincia, conocer el contenido de la Ley 25.929 es un derecho fundamental, así como animarse a preguntar e indagar sobre cualquier duda que aparezca, con lxs profesionales de confianza.
En Clapps! invitamos a una conciencia más plena y empoderante para vivenciar estos procesos desde lugares menos vulnerabilizantes para gestantes, familiares y acompañantes en estos procesos. (Contactos: Lucía Brienza: lubrienza@gmail.com Ofelia López: doulasderosario@yahoo.com.ar)