Clapper txt_LUCAS CALOMINO_May_2019
Quizás los cambios de opinión y el aumento de la participación entre los adolescentes, respecto a la política, surgió un miércoles 31 de octubre del año 2013 cuando se aprobó mediante La Cámara de Diputados que las personas mayores de 16 años pudieran votar en las elecciones legislativas.
Desde allí, una variación constante empezó a surgir. Los jóvenes comenzaron a involucrarse de a poco, teniendo distintas maneras de participación y llegando a un punto muy alto en las elecciones presidenciales del año 2015. Es de esta manera, que el público juvenil fue aumentando y se fue interesando cada vez más en los distintos partidos políticos que existen en el país.
Política en los jóvenes, ¿Qué es para ellos?
Una pregunta muy amplia y posiblemente sin una única respuesta debido a que no para todos significa lo mismo. Se pueden observar claramente tres grupos. Para algunos la política es algo indispensable en la que hay que participar para que a través de ésta se pueda conseguir un mejor estilo de vida y en un futuro podamos tener una mejor República. Suelen estar asociados a militancias, y participando de manera constante a través de distintos métodos. Su ideología para ellos es algo primordial.
Para otros es algo importante, pero no se relacionan de manera seguida con ella. Prefieren dejar de lado la militancia, la publicidad, y guardarse sus pensamientos para mostrarlos sólo en algunas conversaciones o en las urnas cuando sea correspondiente. Y después, se encuentran otros tipos de jóvenes en los cuales para ellos la política no ocupa ninguna importancia en su vida. No hablan sobre temas referidos a ello, creen que la Argentina no tiene resolución, que no hay ningún representante como la gente, que la solución está en Ezeiza arriba de un avión y solamente van a votar por obligación.
Es de esta manera, que no todos los adolescentes se encuentran en la misma sintonía y se complica determinar qué significa la política para este grupo de personas. Se pueden encontrar desde los cegados y fanáticos por las ideas de ciertos partidos, hasta aquellos que no le dan la mínima importancia ni opinan sobre estas cuestiones.
Posiblemente a muchos les sucedió que en sus primeras elecciones participativas, las energías eran otras y sus motivaciones por emitir su primer voto eran muchas. Sin embargo, con el paso del tiempo ese ímpetu se pierde. Puede ser por distintos factores que hacen que vaya decayendo, pero el destino es siempre él mismo: dejan de participar o lo hacen obligados.
Política en los jóvenes, ¿Cómo llegan a vincularse con la militancia?
Es muy difícil formar una ideología política sin tomar en cuenta pensamientos de otras personas. Los jóvenes suelen aferrarse a las ideas de la familia y de la escuela o institución a la que concurren, en ese preciso orden. Primero se siguen las doctrinas que se escuchan en casa. La opinión de un abuelo, de papá o de mamá empiezan a formar a temprana edad a una persona en la política.
Ya con el paso del tiempo, y cuando se va creciendo, los adolescentes pueden llegar a militar por las ideas que creen convenientes. En esta edad, posiblemente empiecen a surgir los primeros choques entre ellos y sus familiares, aunque en cuestiones de menor medida porque los pensamientos a la larga terminan siendo los mismos, como si se heredarán.
Sin embargo, la escuela, institución y hasta en algunos casos la facultad a la que concurren, pueden ser importantes para que formen sus ideas. Los dichos de profesores, el material con el que trabajan y demás cosas pueden aportar conocimientos políticos. Aun así, cuando ya la cabeza está aferrada a lo que se dice en casa, puede devenir en discusiones entre los encargados de la clase y sus alumnos, o así mismo, entre compañeros de aulas.
Es de esta manera, que con sus formas de pensar que fueron desarrollando y eligiendo, comienzan insertándose en la política. Por ende, se vinculan en muchos casos a través de la militancia, compartida con otras personas que piensan de la misma manera.
Política en los jóvenes, ¿Qué prácticas tienen?
Desde encabezar marchas, hasta publicaciones en las redes sociales, sus prácticas dentro de ésta son un montón. Pasan por colgar afiches en la calle, pintar murales, opinar dentro del ámbito político en el que participan, y demás. Sus motivaciones para llevar adelante sus ideologías los transforman y los transportan a hacer todas estas cuestiones.
Están muy presentes en las redes, más precisamente en Twitter. Con sus enormes conocimientos de cómo funcionan, tratan de ayudar a sus partidos a conseguir lo necesario, más en campañas políticas. Aun así, no todo es fácil. Jóvenes que militan y participan activamente pero lo hacen con otras ideologías, también se hacen escuchar y es por eso que las discusiones se empiezan a dar en distintos ámbitos.
Política en los jóvenes, un fenómeno que va por más
Aunque no sean muchos los adolescentes que participan en la actividad política, se puede afirmar que, por lo menos, con el paso del tiempo se ven más. Éstos se observan mucho en época de elecciones, ya sea a través de una pantalla o en la calle misma. Mostrando un interés de preocupación por su presente y por su futuro, tratando de que este sea un poco mejor.
Las opiniones de ellos hoy en día, se escuchan de igual manera que las de un adulto. En una discusión entre personas de más alta edad, ya no son callados a la hora de opinar, y en las mesas familiares también se hacen oír. Es por esto que decimos, que la militancia política en los jóvenes va a ir contagiando a demás adolescentes que todavía no lo sienten de igual manera.
Con una juventud preocupada en lo que pasa políticamente con nuestro país, estarán más obligados en un futuro los mandatarios que nos gobernarán a hacer las cosas respectivamente bien. Teniendo presente los jóvenes desde temprano, que un país sin memoria, está condenado a repetir su historia. Es decir, condenados a algo que ellos no querrán para sus hijos, dependiendo de sus ideologías.