Clapper txt_Victoria Rotemberg_Abr_2019
Rosario es una de las ciudades que Lisandro Aristimuño no pasa por alto en sus giras anuales. A pesar de haberse presentado en diversos espacios, sus shows en teatros se tornan únicos acompañados de buenos sonidos y luces impecables. Esta vez, en el marco de su gira 2019 y con Constelaciones como su último material discográfico, el joven rionegrino hizo vibrar una vez más a su público que lo ovacionó de principio a fin durante dos horas de música ininterrumpida en el mítico escenario del emblemático teatro ubicado en Laprida y Mendoza.
Lisandro Aristimuño, arrancando con ese asunto de la ventana
Uno de los discos más imponentes de Lisandro fue el encargado de abrir el show. Luces azules y aplausos ensordecedores aclimataron un teatro expectante. Así comenzó a sonar “Blue”, de su disco Ese Asunto de la Ventana, que vio la luz en mayo de 2005. “…y esto es así, música para mí, no dejaré ya descansar mis pies”, reza la última frase. Así fue. Imposible quedarse quietxs aunque suene la canción más lenta.
Luego viajamos a 2007, con 39 grados. “Para vestirte hoy” puso a prueba la genialidad de un juego de luces que continuaron otorgando un cálido clima. “Una flor”, fue el elegido de su último material, para dar lugar a “How Long”, que en tono de chiste fue rematado con un “significa jaula grande (por “jaulón”)” de un simpático Lisandro. Esta canción tiene, además, la particularidad de la intervención de su hermana Rocío, quien además de la percusión en la banda impacta con su zapateado flamenco y da un cierre único a la canción.
Lisandro Aristimuño, más música y emociones
“Vi tu foto”, de Las Crónicas del Viento, continuó con el show que luego se tornó con más energía de la mano de “Anfibio”, que nos recordó lo lindo de vibrar en los campos de luz. Luego, “Tres estaciones”, “En mí”, “Tu Nombre y el Mío”, fueron las elegidas para seguir llenando el espacio de música y emociones. “Todas mis letras se tratan de amor”, dijo Lisandro. Y sí, así lo recibimos todxs.
“Lobofobia”, “Good morning life”, “Me hice cargo de tu luz”, “La última prosa” y “El beso”, sumaron una seguidilla de emociones que se completó con “Aunque no estés aquí”. Una canción que trata sobre ausencias que se presentifican de algún modo. “Es la primera canción que compuse para mi hija, Azul, cuando aún estaba en la panza de su mamá”, nos contó emocionado. Si bien para muchxs la letra se conecta directamente con alguien que se fue, para Lisandro es sobre alguien que no está pero que pronto estará.
Lisandro Aristimuño, es todo lo que hay
“Pozo”, de Mundo Anfibio, fue la encargada de asustarnos con la sensación de que el show había finalizado. Lejos de ello, la banda volvió a ingresar y entonó dos de los temas más escuchados de Las Crónicas del Viento: “Azúcar del Estero” y “Es todo lo que tengo”.
Un nuevo cierre mentiroso apareció en escena y, con algunxs resignadxs yéndose, el escenario volvió a ponerse azul y una de las canciones más lindas de Constelaciones se hizo presente: “Tu corazón”. Todxs paradxs aplaudiendo y bailando, nos fuimos entonando “Elefantes”, con el sonido de una percusión inolvidable que nos dejó manijas para una próxima presentación. Pensando en que, tal vez, sabio es el que riega una pequeña flor, absorbimos lo lindo de la simpleza y esperamos ansiosxs una nueva presentación de este gran artista argentino.