Clapper txt_Agustín Vargas_Ago_2018

El corto, ganador de la convocatoria Espacio Santafesino 2015 en la categoría Cortometraje Regional y producido por Mirá Producciones y PEZ Cine, llega a la ciudad tras su paso por el Short Film Corner del Festival de Cine de Cannes 2018. En diálogo con Clapps!, Tamburello califica esta experiencia como “increíble” y destaca el hecho de haber podido asistir, durante una semana, a charlas, clases magistrales, desayunos de negocios y fiestas. “Se hizo una proyección privada, a sala llena, y tuvo una gran repercusión”, se alegra la directora, quien también comenta que se abrieron las puertas de festivales como el Shorts Film México, el Festival de Cine del Desierto (también en México; aquí la realización ya ha sido galardonada en la categoría Mejor Guión), la 9ª Muestra de Cine Latinoamericano de Leipzig (Alemania), la Muestra de Cortometrajes Buenos Aires/Paris y el Festival de Cine Latinoamericano de Rosario.

Tallar un guión

Tamburello, actriz y dramaturga, es autora de premiadas obras de teatro, entre las que se destacan Mujeres de Ojos Negros y Jet Lag, el amor en punto muerto, donde predominan conflictos familiares bajo la impronta de la comedia negra. En lo que respecta a lo audiovisual, escribió guiones para el corto Dách, la ficción La Redonda y el unitario Canela. El proyecto (ver más abajo), entre otros. En Rabia, además, dirige su primera filmación.

Clapps!_ ¿Cómo fue el proceso de elaboración del guión?

Tamburello_ Es una historia que surgió a partir de un ejercicio de un taller de guión que coordina Francisco Pavanetto en el que había que escribir la primera escena de una película. Yo empecé con esa primera escena de Rabia, y Francisco me instó a que la siga escribiendo, a que tome un formato ya sea de largo o de corto. Decidimos un corto, que tuvo un año de reescritura y de reelaboración.

Clapps!_ A la familia se la suele caracterizar como una de las instituciones desde donde se ejerce violencia, ya sea física o simbólica. ¿Es una temática que te interese especialmente? Por su parte, en tus guiones predomina el humor negro, ¿en Rabia está presente?

Tamburello_Creo que la familia es una institución violenta por lo que genera, es el primer núcleo en el que una persona se desarrolla y a partir de ahí es todo lo que sucede con esa persona hasta que se muera, probablemente, salvo que decida pelearse. Me encantan las historias de familias; mi primera obra, Mujeres de Ojos Negros, trata sobre la relación de una madre y una hija; Jet Lag habla de una dinámica familiar un poco violenta. El humor negro me parece necesario, en todos los órdenes de la vida, es una forma de no caer en la solemnidad. Rabia trata sobre la violencia pero, de todas maneras, lo que tratamos de hacer es hablar de un personaje que no sea empático para el espectador, pero a la vez tratamos de no juzgarlo desde el guión, la puesta en escena y la dirección de actores. [Quisimos] Hablar de cómo error y violencia van de la mano; se comete un error en un rato de violencia y ese error genera más violencia… se vuelve todo un ciclo en el que el protagonista queda sumergido. Más allá de la dinámica familiar, de lo que queríamos hablar en este corto era de estos errores que nos terminan condicionando el resto de nuestras vidas.

El actor Carlos Resta y su hijo Santino son quienes protagonizan al padre e hijo de esta película que cuenta con equipo y elenco enteramente rosarinos. “El corto fue escrito para Carlos Resta, quien además de ser un gran actor de Rosario es un amigo”, admite Tamburello, a quien luego se le ocurrió probar al hijo de éste, Santino, que nunca había actuado. “El niño fue una maravilla completa, le hicimos un casting muy difícil y lo pudo cumplir. No hizo falta ver a ningún otro”, agrega esta realizadora que, al ser consultada por producciones que hayan sido referentes, menciona El Hijo, de los hermanos Dardenne.

A pesar de que los protagonistas son masculinos, a diferencia de muchas de sus obras, en Rabia hay una gran presencia femenina encarnada por el personaje de la actriz María Celia Ferrero. “Esta vez decidí que el protagonista sea un hombre —explica—, pero hay mucho de lo femenino puesto acá; desde mi mirada, que soy una directora mujer, hasta el desenlace que tiene que ver con una especie de heroína femenina un poco cínica”.

El salto a la gran pantalla

Tamburello agradece de manera enfática a todo su equipo de rodaje y producción que le permitió sortear los temores y dificultades propios de una primera dirección. “La verticalidad me parece a esta altura una locura”, dice en un tramo de la charla para acentuar su postura de “abrir el juego para poder escuchar opiniones”.

Clapps!_ ¿Cómo fue el paso del teatro al cine?

Tamburello_Son dos lenguajes muy distintos. En el teatro la escena está permanente viva, las cosas están pasando y los inconvenientes que pueden pasar en escena el director no puede controlarlos. En el cine es diferente porque uno desde el casting ya elige con quién va a trabajar. Lo que sí hicimos, y creo que fue un aporte de mi experiencia teatral, fue ensayar mucho. Escribí un perfil de personaje para la madre, el padre y el niño, lo leímos, se hicieron muchas consultas y, después, comenzaron los ensayos. Al ser Carlos y Santino padre e hijo ya había algo del vínculo entre ellos que no tenía que construirse, por lo que nos centramos en buscar matices a sus personajes.

Una de las secuencias del unitario «Canela»

Tamburello, entre las realizadoras emergentes

Estamos en un momento político en el que necesitamos más la mirada de las mujeres”, afirma la directora tras rescatar la importancia de que el Estado provincial y el local financien y apoyen proyectos artísticos. “La mirada de la mujer con respecto a la de los hombres —continúa—, en cuanto al humor, a la escena, a la dirección de actores y hasta la puesta de cámara, siempre es diferente, y en esta diferencia se enriquece la cultura”.

Además del estreno de Rabia, la ceremonia contará con la proyección de Canela, unitario televisivo escrito por la propia Tamburello y dirigido por Cecilia del Valle que parte de un proyecto de grabación de cinco años —un documental Incaa se encuentra en posproducción— que se aproxima a la figura de Canela Grandi, arquitecta trans de la ciudad de Rosario. “Ayax Grandi, a los 48 años, decidió ser Canela. Este unitario acompaña a la protagonista a través de un parangón con cinco etapas de una obra en construcción: Demolición, Planificación, Cimientos, Estructura y Terminaciones. Y es a lo largo de este gran proceso de deconstrucción y construcción que llegamos a conocer a sus hijos y su madre, su trabajo y sus amigas”, reza el comunicado de prensa.

Equipo

Dirección y guión de Rabia: Romina Tamburello. Elenco: Carlos Resta, Santino Resta, Juan Pablo Yeboli y María Celia Ferrero. Productores ejecutivos: Federico Actis y Ariadna Solís. Productores asociados: Luciana Tamburello, Lucas Pérez, Santiago King y Matías Patiño. Director de fotografía: Marcos Garfagnoli. Sonido: Agustín Pagliuca. Música: A. Pagliuca y Tomás Grimaldi. Dirección de arte y vestuario: Ana Julia Manaker. Montaje: Alejandro Coscarelli. Duración: 17 minutos.

Dirección de Canela: Cecilia del Valle. Guión: C. del Valle y R. Tamburello. Producción: Dos Pálpitos Cine. Duración: 28 minutos.