Netflix vuelve a apostar por las mujeres, en este caso con la serie GLOW, emitida en junio de este año. Al estilo Orange Is The New Black cuenta con un elenco principal totalmente femenino (exceptuando excepciones) y siguiendo la onda de Stranger Things apela a la melancolía ubicando la historia en los años 80’. Desde Clapps! vimos la serie, la analizamos, y les contamos por qué la recomendamos.
Gorgeous Ladies Of Wrestling
GLOW es una serie de comedia dramática emitida por Netflix. Es una versión ficcionada de lo que fue el grupo Gorgeous Ladies Of Wrestling (G.L.O.W), un grupo de mujeres que hacían lucha libre allá por los 80’. Liz Flahive y Carly Mensch tomaron a estas mujeres luchadoras para inspirarse a hacer una versión ficcionada de la lucha libre femenina. Las GLOW originales aparecieron en televisión en 1985, siguiendo esta forma de entretenimiento televisivo yankee que siempre fue terreno masculino.
La ficción de Netflix se centró en el backstage del programa de televisión, en el proceso que tuvieron que pasar estas mujeres para convertirse en personajes de lucha libre. Cada una de ellas creó su propio personaje, tales como Zoya Destroya (una soviética comunista), Liberty Belle (la encarnación de EEUU antagonista de Zoya), Machu Picchu, La Loba, y muchas más. Es muy divertido ver cómo estas mujeres que nada tienen que ver con el mundo de la lucha libre femenina siguen un recorrido de entrenamiento y actuación hasta terminar amando ese “deporte”.
Los personajes de GLOW
Los personajes principales de esta serie son dos amigas que se odian, Ruth (Zoya Destroya) y Debbie (Liberty Belle). Ruth tuvo sexo con el marido de Debbie y bla bla bla. En este punto la serie cae en un cliché que al principio jode porque es más de lo mismo, pero que después le da sentido a los personajes y ayuda a que estas mujeres logren crear sus personajes de lucha libre para ser antagónicos y que funcionen muy bien en pantalla. Se convierten en el acto principal del show de lucha libre.
La particularidad de este grupo de mujeres luchadoras es que (en la ficción) ninguna de ellas era actriz (exceptuando a Ruth y Debbie), por lo que al día del casting (otra vez ficticio, vale aclarar) cayeron mujeres muy distintas entre sí. Dos eran viejas, una super tímida, otra ya encarnaba el personaje de Lady Wolf en su vida diaria.
Los únicos dos hombres que aparecen regularmente en son el director y el productor del programa de televisión. El director es a la vez productor de películas y guía a estas mujeres a través de todo el proceso de creación de este programa de televisión; y el productor es un niño rico de Beverly Hills que siempre soñó con hacer un programa de lucha libre femenina. Estos dos personajes aportan a muchas de las escenas cómicas de la serie. Los personajes de GLOW son únicos, estrafalarios, exagerados, a veces odiables y otras admirables y marcados por una gran impronta feminista; no se puede pedir más.
Apelando a la nostalgia
Una de las razones por las cuales desde Clapps! recomendamos ver GLOW es que está ambientada en la época de los 80’. En serio, ¿quién se va a negar a volver a los 80’? Los que no la vivimos siempre quisimos hacerlo, y los que la vivieron siempre quieren volver. Al parecer todo el mundo era feliz en los ochenta (por lo menos en Estados Unidos). Las calzas, el pelo frizzado, el glitter, las Adidas blancas, la colita de caballo, Volviendo al Futuro y una onda a Flashdance. Todo eso es GLOW.
Desde el primer capítulo entramos en los maravillosos 80’, acompañando a Ruth y Debbie en una clase de gimnasia de esas que pasaban por la tv, y a partir de ahí no nos vamos más. Hay una escena en una pista de rollers con música disco, otra donde lavan autos en bikini para recaudar plata. Siempre hay pistas y guiños a famosos y películas de la época, y eso nos encanta.
En espera de renovación por una segunda temporada
GLOW cuenta con una sola temporada hasta el momento, de 10 capítulos de 30 minutos. Cada uno es ideal para distenderse un rato, una especie de Titanes en el Ring versión femenina que hace reír con un humor negro bastante discutible, una banda de sonido que remonta al pasado y un elenco con diversidad racial y etaria que enamora. Esperamos que Netflix decida renovar la serie para una segunda temporada. ¡Queremos ver a las chicas en acción! Si no la viste ¿qué estás esperando? Es perfecta para hacer una maratón en una sola noche.