Clapper txt_Luciana Marioni
Sofar (abreviatura de Songs from a Room) Sounds nace en Inglaterra en 2009 como una compañía de inicio de eventos musicales; se autodefine como una comunidad mundial en la que los invitados y artistas se encuentran para vivir una velada diferente, con la música como protagonista pero en un ambiente íntimo y secreto.
Los conciertos empezaron luego de una mala experiencia que tuvieron tres amigos en un recital de Fryendly Fires, en el que no pudieron disfrutar de la música porque la gente hablaba, hacía ruido con botellas de cerveza, además de no sacar los ojos de sus celulares. Enojados con la situación, se les ocurrió hacer un show propio en uno de sus departamentos, al norte de Londres, para el que invitaron a 8 amigos a escucharlos. Ya para el segundo recital se sumó más gente que se había enterado por el boca en boca. Al poco tiempo esta nueva propuesta musical llegó a París, Nueva York y otras ciudades.
Rosario se une a Sofar
Julieta Eseverri le cuenta a Clapps cómo conoce a Sofar y de qué manera llega a Rosario esta comunidad: “A mediados de 2014 descubrí videos de Sofar navegando online, buscando sobre nuevas propuestas. Al principio no entendía bien de qué se trataba, es por eso que siempre insisto que tienen que vivir la experiencia Sofar para realmente entender de qué va. Me comuniqué con Sofar Sounds (Londres) y me derivaron con el city leader Argentina, Hernán Pato (S. Sounds Buenos Aires) y con Luciana Padua (hoy city leader de Nuremberg). Hicimos algunas calls para conocernos hasta que finalmente me nombraron city leader (líder en la ciudad) de Sofar Sounds Rosario y comencé a armar el staff. En noviembre de 2014 realizamos la primera sesión de sofar”.
Sofar Sounds es un proyecto sin fines de lucro que le da apoyo a los artistas emergentes e independientes, los convoca a ser parte de esta gran familia y les abre caminos con la difusión global pero también, al conectarlos con otros artistas y ciudades del circuito Sofar mundial.
A los músicos que participan de estos shows íntimos les ofrecen un video filmado en full HD editado, que se difunde en el canal global YouTube de Sofar Sounds con más de 430.00 suscriptores, y fotos de alta calidad. Además de ser parte de la familia Sofar y poder tocar su música en cualquier otra ciudad del mundo que sea parte de la comunidad.
“Seguimos una línea de música para ser escuchada cómodamente en el living de una casa, dentro de un clima totalmente íntimo. Los estilos varían desde el rock, reggae, funk, hasta el pop alternativo, pasando por folclore, bossa nova y tango”, así describe Julieta el perfil de Sofar.
En estos tres años de vida realizaron más de 25 sesiones en diferentes locaciones secretas de Rosario, la mayoría fueron en casas particulares que ofrece quien quiere ser anfitrión, pero también en museos, espacios culturales y locales, en los que participaron 75 proyectos musicales como invitados.
Clapps! Le pidió a Julieta que nos adelante algo de lo que se viene el domingo, sin que deje de ser sorpresa. “Nos regalarán su música tres proyectos musicales de nuestra ciudad. Contaremos con la presencia de músicos que han pasado por Sofar Sounds Rosario en estos tres años”, adelantó. El show en Lavardén es con capacidad limitada, sólo 200 personas podrán ser parte de esta hermosa experiencia Sofar. Se pueden llevar almohadones, mantas y el mate para sentirse como en casa.
Para ser voluntario, anfitrión, posible artista invitado ó asistir a una sesión (como la del 10/12) deben ingresar a www.sofarsounds.com o escribir a rosariosofar@gmail.com. La entrada es gratuita. La joven y copada coordinadora, dice que las personas ya entran al juego en el momento que envían el mail pidiendo su lugar en la sesión. Una vez que llegan a la locación se entregan por completo a la aventura.
Para el que nunca tuvo una vivencia Sofar, Julieta Eseverri nos lo pinta con sus palabras: “No son únicamente conciertos íntimos en casas secretas, no son solo videoclips, ni tampoco una producción fotográfica; son encuentros de corazones con ganas de conectar. Creamos magia desde el respeto y el amor a través de la música, una búsqueda de un cambio de conciencia. En Sofar se genera un espacio donde el músico realmente es escuchado, conecta con él mismo, con el público y viceversa”.