«La porte ètroite»
Una mancha, una forma clara se presenta sobre un fondo invisible, una imagen que
alguien verá. Algo puede reconocerse, una silueta, un fragmento, una figura humana entre penumbra y claroscuro.
La vista se nubla, el cuerpo se deforma, el tiempo nos aniquila implacablemente.
La voz estará ausente, las palabras serán silenciadas, pero igualmente alguien las leerá. Sublime en movimientos de reprimida sensualidad, las formas nos contarán lo que ellas pueden portar.
Serán como una puerta estrecha, para entrar en otro mundo que trasciende al cuerpo y solo deja entrar unas pocas almas sensibles…