A simple vista, el Fructuoso Record Club (FRC) se podría definir como una sala de ensayo rosarina, pero resulta que ese término les estaría quedando chico porque no se identifican con las salas convencionales o típicos estudios de grabación. Prefieren llamarlo Club porque la esencia de este espacio navega en los intercambios que se generan cuando dos o más personas se encuentran.

«El tiempo que importa no es sólo el que se pasa en la sala, sino también en el living. El living es el corazón del club», cuenta Ezequiel Fructuoso, impulsor del FRC. Y agrega: «Es ahí, en ese espacio de compartir, que las cosas se vuelven más fecundas: con un mate o una cerveza de por medio, y a veces también unas pizzas, se propicia el trabajo en equipo de personas que de otra forma no se hubieran cruzado, con distintas visiones, saberes y aproachs musicales».

Así es que llenando el club de cables, entre mate, birra y pizza (en el orden que elijan), nacen los mejores frutos: las canciones, los discos, las anécdotas y, por supuesto, los amigos.

El club en el salón: tres discos, tres shows

En lo que va del 2017, en el FRC se han grabado tres discos y eso se celebrará el próximo viernes 28 de abril, a las 21:30hs, en el Gran Salón de Plataforma Lavardén.

En Clapps! los compartimos:

«Cuatro Anatemas», segundo trabajo discográfico de Prima Limón, proyecto de Julia Capoduro.

«Despierta», primer disco de Mercedes y los un millón, de la cantautora Mercedes Ianniello.

En el FRC también nació el álbum debut de Madhu, proyecto solista de Maximiliano Kanter.